jueves, 27 de septiembre de 2007

tic... tac... tic... tac...

El factor tiempo... todo un tema: Borges traía a colación una pregunta: “Que es el tiempo? Si no me lo preguntan, lo se. Si me lo preguntan, lo ignoro”. Y quien pudiera negarle veracidad al interrogante de uno de esos tipos que siempre tienen la justa cuando uno no puede ponerle palabras a lo que siente.
De todos modos, no esta demás preguntarse: que nos deja el tiempo? Momentos, personas, novedades que se hacen viejas en un santiamén, noticias asesinas que todos olvidaran al caer la noche. Pero atenti, que el tiempo corre y no para...
Sera que aunque el tiempo pasa, las personas seguimos repitiéndonos según las cosas que aprehendemos en las cotidianeidades de la vida. Aquí va una selección de un texto de Roberto Arlt, escrita allá por las primeras décadas del 1900, pero tan bueno que sigue siendo aun vigente...


“Hoy, mientras venia en el tranvía, carpeteaba a una jovenzuela que, acompañada por el novio, ponía cara de hacerle un favor a este permitiéndole que estuviera al lado. En todo el viaje no dijo otra palabra que no fuera si o no. Y para ahorrarse saliva movía la "zabeca" como mula noriega. El gil que la acompañaba ensayaba todo el arte de conversación, pero al ñudo; porque la nena se hacía la interesante y miraba al espacio como si buscara algo que fuera menos zanahoria que el acompañante.
Yo meditaba broncas filosóficas al tiempo que pensaba. En tanto las cuadras pasaban y el Romeo de marras venia dale que dale, conversando con la nena que me ponia nervioso de verla tan consentida. Y sobrandola, yo le decía "in mente":
-Nena, no te hablare del tiempo, del concepto matemático del rantifuso tiempo que tenían Spencer, Poincare, Einstein y Proust. No te hablare, del tiempo espacio, porque sos muy burra para entenderme; pero atendé estas razones que son de hombre que ha vivido y que preferiría vender verdura a escribir:
No lo desprecies al tipo que llevas al lado. No, nena; no lo desprecies. Cierto es que tu novio tiene cara de zanahoria, con esa nariz fuera de ordenanza y los "tegobitos" como los de una foca. Cierto que en cada fosa nasal puede llevar contrabando, y que tiene la mirada pitañosa como sirviente sin sueldo o babión sin destino, cierto que hay muchachos mas lindos, más simpáticos, mas ranas, mas prácticos para pulsar la vihuela de tu corazón y cualquier cosa que se le ocurra al que me lee. Cierto es. Pero el tiempo pasa, a pesar de que Spencer decía que no existía y Einstein afirme que es una realidad de la geometría euclidiana que no tiene minga que ver con las otras geometrías... Atenti, nena, que el tiempo pasa! Pasa. Y cada día merma el stock de giles. Cada día desaparece un zonzo de la circulación. Parece mentira, pero así no mas es.
Atenti, nena; que el tiempo no vuelve!...No seas, entonces, baguala con el hombre, y atendelo como es debido. Medita. Hoy, todavía, lo tenés al lado; mañana podes no tenerlo. Conversalo, que es lo que menos cuesta. Pensa que a los hombres no les gustan las novias silenciosas, porque barruntan que bajo el silencio se esconde una mala pécora y una tía atimada, zorrina y broncosa.”

(ya lo habia posteado en mi flog)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy cierto!!! Uno valora lo que tiene cuando ya no está! Tendriamos que agradecer todo lo que tenemos todos los días!!

Besote Seba!